Los Mochis, Sinaloa. La dirigencia municipal del PRI ahomense realizó un emotivo homenaje a Magui Sandoval por su sorpresiva muerte.
Fue precisamente en las instalaciones del PRI en esta ciudad en donde Nora Alicia Arellano, presidenta y Raúl Cota, Secretario del partido, encabezaron el reconocimiento.
Ahí se dieron cita alrededor de cien personas, todos amigos de Magui o que en algún momento de sus vidas la trataron.
“LA PAJAERA”
Nora Alicia Arellano recordó que fue en los noventa cuando conoció a Sandoval y la definió como una mujer priista cien por ciento y que nunca renegó de su partido.
Dijo cómo el mote de “La Pajara” le quedó después de que la propia Magui le había puesto así a Sofía Carlón y que cuando le reclamo del sobrenombre, le respondió “porque era la Pajara mayor”, lo que le agradó.
Arellano recordó los términos en que se expresaba Magui, como aquellos de “roce social” o “roce político”, que eran característicos en la originaria de Sinaloa de Leyva, pero con muchos años en Los Mochis.
También un sello característico de la homenajeada, como la sonrisa que siempre tenía para todos aquellos que la escuchaban.
Presentes estuvieron los hermanos de Magui, Juan y Heidy, así como el amigo José Magallanes y la sobrina Pilar.
LA SONRISA PERMANENTE
Quizás como buena priista que fue, dos de sus fotos fueron colocados abajito del logo del partido y como testigo mudo la imagen de Luis Donaldo Colosio a un lado,
La topeña mencionó el cariño que le tenían a la sinaoita al ver el impacto que causó su muerte en las redes sociales.
Nora Arellano leyó entonces un poema en honor a “La Pajara” como le decían muchos de cariño a Magui.
En el pensamiento destacó aquello de que “hablar con ella era alegrar el alma”. Las palabras le salían entrecortadas a la dirigente del PRI porque emocionada las lagrimas rodaban por sus mejillas.
Juan Sandoval refirió el cariño profundo que sentían su hermana y él. También cómo le ponía unas “regañadas” porque se pasaba de noble.
Juan agradeció la presencia de todos los presentes y reveló que Magui les hablaba de cada uno de sus amigos por sus nombres.
EL PODER DE LA AMISTAD
Al tocar el turno a la sobrina Pilar, hija de Juan, reconoció que ahora que conoce cómo la gente quería a su tía, le hubiera gustado conocerla a fondo.
Y tal vez fue Pilar quien definió mejor el carisma de Magui: “Solo una mujer como mi tía es capaz de tener está convocatoria”, dijo.
Un grupo musical compuesto con dos trompetas, un acordeón, un violoncelo y un abajo interpretaban las canciones que más le gustaban a Magui: “Sonora y sus ojazos Negros” por los constantes viajes que hacía a la frontera en “roces comerciales”.
También entonaron Nube Viajera y Una página más, como para entender que ella estaba presente de una u otra manera.
Saida, la hermano menor, fue muy expresiva en el dolor que sentía y definió a la que partió como una mujer luchadora, la que pasaba horas y horas hablando con su papá de política.
Saida también constato el cariño que su hermana se supo ganar entre quienes la tratamos, y lo agradeció.
FORTALEZA
Fue el conocido periodista Julio Cesar Martínez quien también definió a la homenajeada; un mujer a la que ninguna tormenta tumbaba.
Pero fue más allá al decir que se sentía como el menor de sus hijos, por el amor de madre que le profesaba Magui.
Fue “El Coco” quien comentó el cariño que Magui le tomó a su hijo mayor Emmanuel, cuando hace ocho años fue testigo del nacimiento del niño.
En el homenaje a Magui Sandoval de parte del PRI Ahome rondó la tristeza por la amiga que se fue, pero también la alegría por una mujer que siempre tuvo una sonrisa para todos y que ponía las cosas en su lugar, como bien la definió Nora Arellano.
Por eso no se le rindió un minuto de silencio, sino de aplausos y todos de pie. (POR VICTOR MANUEL BUSTAMANTE)
